Recientemente se ha publicado en la revista The Journal Sexual Medicine un estudio titulado «Características Psicológicas de los practicantes de BDSM» (Psychological Characteristics of BDSM Practitioners). La investigación fue dirigida por el psicólogo Andreas Wismeijer, académico de la Nyenrode Business University (Países Bajos).
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En los resultados, según la ficha descriptora del artículo, se indica (las traducciones son nuestras):
«The results mostly suggest favorable psychological characteristics of BDSM practitioners compared with the control group; BDSM practitioners were less neurotic, more extraverted, more open to new experiences, more conscientious, less rejection sensitive, had higher subjective well-being, yet were less agreeable. Comparing the four groups, if differences were observed, BDSM scores were generally more favorably for those with a dominant than a submissive role, with least favorable scores for controls.»
«Los resultados sugieren principalmente características psicológicas favorables de los practicantes de BDSM en comparación con el grupo control; los practicantes de BDSM eran menos neuróticos, más extrovertidos, más abiertos a nuevas experiencias, más consciente, menos sensibles al rechazo, había mayor bienestar subjetivo, sin embargo, eran menos agradables. Comparando los cuatro grupos, si se observaban las diferencias, las puntuaciones BDSM fueron en general más favorables para los que tienen una posición dominante que un rol de sumisión, con las puntuaciones más desfavorables para los controles. «
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Tras lo cual apuntan la siguiente conclusión:
«We conclude that BDSM may be thought of as a recreational leisure, rather than the expression of psychopathological processes»
Llegamos a la conclusión de que el BDSM puede ser pensado como un ocio recreativo, en lugar de como la expresión de procesos psicopatológicos.
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En la ficha del artículo pueden verse algunos datos más en relación a cómo se hizo el estudio.
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A través de las primeras notas que hemos leído en prensa, y de acuerdo con lo indicado en el resumen de resultados, sabemos que el estudio indica que quienes ejercen el rol de dominante obtenían las puntuaciones más altas, los switch puntuaciones intermedias y las más bajas fueron para las personas sumisas, pero incluso estas puntuaciones seguían siendo superiores a la media en la población practicante de sexo convencional. El doctor Wismeijer apunta que, aunque no sabe exactamente por qué los practicantes de BDSM podemos ser psicológicamente más sanos, es posible que esté relacionado con el hecho de que seamos más conscientes de nuestras necesidades y deseos sexuales, lo que se traduciría por menos frustración sexual y más seguridad y bienestar en las relaciones.
Nos encantaría poder echar un vistazo al estudio en su versión íntegra… pero cuesta 42€ poder disponer del artículo durante 24 horas online, así que va a ser que no.
Si hay por ahí algún profesional inscrito en alguna asociación, gabinete o colegio suscrito a esta publicación, que pueda tener acceso y nos quiera hacer el favor… pues le quedaríamos eternamente agradecidos. Quienes deseen buscarlo, la referencia es:
Wismeijer, A. A.J. and van Assen, M. A.L.M. (2013), Psychological Characteristics of BDSM Practitioners. Journal of Sexual Medicine. doi: 10.1111/jsm.12192
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Sobre The Journal Sexual Medicine, revista de la ISSM:
La Sociedad Internacional de Medicina Sexual (ISSM, anteriormente conocido como ISIR / ISSIR) se creó en 1978 con el propósito de promover la investigación y el intercambio de conocimientos para la entidad clínica “impotencia” por toda la comunidad científica internacional. La orientación principal de ISSM fue inicialmente hacia la ciencia básica de montaje, defectos en el mecanismo eréctil, y los aspectos clínicos de diagnóstico y tratamiento de la disfunción eréctil. La orientación es ahora hacia todo el campo de la sexualidad humana En concreto, el objetivo ISSM:
• Establecer una Sociedad científica en beneficio de la población mediante el fomento de los más altos estándares de la práctica, la educación y la investigación en el campo de la sexualidad humana;
• Desarrollar y apoyar el desarrollo de métodos científicos para el diagnóstico, prevención y tratamiento de enfermedades que afectan la función sexual humana;
•Promover la publicación y alentar las contribuciones a la literatura médica y científica en el campo de la función sexual.
Bajo el paraguas de la SSM, hay cinco asociaciones profesionales continentales o regionales:
• Sociedad Asia-Pacífico para la Medicina Sexual (APSSM)
• Sociedad Europea de Medicina Sexual (ESSM)
• Sociedad Latino-Americano de Medicina Sexual (SLAMS)
• Sociedad de Oriente Medio para la Medicina Sexual (MESSM)
• Sociedad de Medicina Sexual de Norteamérica (SMSNA)
The Journal of Sexual Medicine es también una publicación oficial de la Sociedad Internacional para el Estudio de la Salud Sexual de la Mujer (ISSWSH).
Al final, todo se puede demostrar, esto es lo que diferencia la ciencia del DSM-V. La ciencia se encarga de demostrar suposiciones, basándose en conclusiones cuidadosamente analizadas y estudiadas. El DSM-V no es más que una reunión de colegas donde al final de la jornada, se decide lo que socialmente debe ser aprobado o no, ¿en base a qué? ….. ¿intereses ocultos? ¿número de whiskys? ¿sopla poniente o levante?
Afortunadamente, existen colectivos cuyos criterios morales les conducen a AFIRMAR cuando pueden demostrar. Este es un muy gran paso para el BDSM, un saludo.