Continuamos el texto Sobre SESIONES CONJUNTAS, CESIONES e INTERCAMBIOS. Parte I.
.
_____________________________________________________________
La presencia-ausencia del propietario durante una cesión
“(…) ¿Acaso iba a quedarme sola, a solas conmigo misma?.
No, Pierre no podía hacer eso; no tenía derecho a hacerme eso.
Yo no merecía que me dejara sola. ¿Cómo iba a ingeniármelas?.
«Pierre, quédate conmigo; ¡no me abandones!
Sin ti, sabes que ya no soy nada. No me dejes sola,
porque no podré hacer nada. No lo conseguiré.
Nada es posible sin ti…»
Vanesa Duriés, La Atadura
La cesión puede darse con presencia del propietario durante la práctica, bien como participante activo (compartiendo la sumisa o en intercambio con la sumisa del otro dominante) o bien simplemente como observador, o pude tener lugar con ausencia del mismo.
Por lo general, es preferible, al iniciarse en este tipo de prácticas, que el Amo esté presente durante la sesión y con frecuencia es una de las condiciones que la sumisa presenta para poder enfrentarse a estas situaciones.
En todo caso, la cesión de la sumisa a otra persona en ausencia del propietario sólo debería tener lugar cuando éste tenga una absoluta confianza en el Amo receptor y tenga una garantía razonable sobre la seguridad y bienestar de su propiedad.
“Mi cesión fue algo aparte y poco dado. No estuve presente pero la confianza era tan total que pude permitirme ese desliz. Nunca lo haría si no fuera así (…) se necesita mucho para llegar a eso… una confianza extrema y hablarlo todo antes muchísimo”
Bastinado.
El no sentir esta absoluta garantía en cuanto a la seguridad de su propiedad, es uno de los motivos que pueden inducir a un Amo a no desear ceder a su sumisa en estas condiciones.
Y la sensación de seguridad no es sólo para la persona cedida y su propietario…
“yo he participado como tercero en muchas sesiones compartidas, en las que la sumisa me era cedida, pero en presencia del otro Amo o Ama y a mi eso Me proporcionaba mucha más seguridad”
Txiria
De todas formas, conviene recordar que tal vez no estés preparada para hacer en ausencia de tu Dueño muchas de las cosas que puedes afrontar bajo su tutela directa pero… ¿y otras?. Volvemos a lo de la imaginación: ser cedida no significa necesariamente que sea para eso que estás pensando y para lo que te sabes incapaz.
.
La confianza como pilar imprescindible.
“La confianza que une al amo y a su esclava es fundamental;
es una confianza que condiciona y autoriza todos los excesos,
y con ellos todas las dichas.
Porque lo amo y sé que él me ama,
tengo la certeza de que este amor no nos extraviará
por peligrosos caminos sin retorno.”
Vanesa Duriès, La Atadura
Para empezar, la confianza debe empezar por nosotros mismos:
– Los sumisos necesitamos tener mucha confianza en nuestro dominante para dejarnos guiar a estas situaciones con la certeza de que nuestro bienestar ha sido garantizado de una u otra forma.
“una vez hablado con mi AMO todo ya que confió, y entregada a él, mi AMO, puede cederme, prestarme, lo que él desee para eso soy de su propiedad, y he depositado toda mi confianza en él, y sé que lo hará con todas las precauciones”
xata{}
– E igualmente, tanto dominante como dominado necesitan tener confianza en sí mismos y en la firmeza de la relación. Una seguridad que les permita disfrutar al sacar estos juegos de las paredes del dormitorio e involucrar a terceros, y que no deje espacio a inseguridades y temores del tipo “¿y si prueba y le gusta más el otro Amo/la otra sumisa?”.
“para ceder, antes debemos tener completa confianza en Nosotros mismos, tanto dominante como dominado y entre sí. Las cadenas que Nos atan deben estar bien fraguadas antes de dar ese paso”
Dragon^
– Por último, es necesario elegir a los compañeros de juegos entre gente de confianza, especialmente cuanto más comprometidos vayan a ser esos juegos.
“(…) »Me encantaría compartir nuevas experiencias con vosotros.
Quisiera volver a vivir momentos tan intensos como los que vivimos
en el transcurso de ese fin de semana.
»Sueño con llegar cada vez más lejos en ese terreno, y quisiera
que este aprendizaje y esta progresión tuvieran lugar junto a vosotros y con
vuestra ayuda. Me gustaría llegar a ser «alguien» y explorar mis fantasías a fondo,
más allá de los deseos de Pierre, sin tener jamás miedo.
Poder afrontarlo todo sin aprensiones, ése es mi objetivo.
»La confianza en los compañeros de juego resulta esencial en un terreno donde la sensibilidad a flor de piel debe arrostrar a veces pruebas muy duras. (…)”
Vanesa Duriés, La Atadura
No todo el mundo sirve como cómplice para estas prácticas. A la hora de empezar a compartir sesiones, es importante conocer a las personas con las que vamos a involucrarnos, asegurarse de que todo el mundo “habla el mismo idioma” y tiene expectativas similares.
Cuando los participantes han comprobado que tienen cierto feeling entre sí, las cosas se han hablado bien antes y contamos con la honestidad y buena intención de todos los implicados, cualquier pequeño problema que pueda darse a ultima hora será fácilmente subsanado sin romper por ello el buen ambiente de la sesión.
En el caso de las cesiones la calidad de esta relación es mucho más importante. El dominante receptor de la cesión no suele ser “el primero que lo pida”, si no más bien un Amo de especial aprecio y confianza para el propietario, con quien tenga la garantía de que su propiedad está en buenas manos y de que se van a cumplir los pactos. No hace falta repetir hasta qué punto es esto básico si la cesión va a ser en ausencia del propietario.
(Continúa en «Sobre SESIONES CONJUNTAS, CESIONES e INTERCAMBIOS. Parte III)
.
2 comentarios en «Sobre SESIONES CONJUNTAS, CESIONES e INTERCAMBIOS. Parte II»